Para mí era fundamental la comodidad y por eso desde el principio me olvidé de los vaqueros, que por mucho que sean de talle bajo y elástico en la tripita, me parecen incomodísimos, calurosos en verano y fríos en invierno.
Durante el primer trimestre del embarazo puedes seguir usando tu ropa habitual. A partir del segundo, yo me decanté sobre todo por vestidos. Me parecen comodísimos, no te tienes que preocupar de combinarlos con nada y puedes escoger la forma y el largo que más te favorezca. En este punto tienes dos opciones, hacértelos a medida a precios asequibles con cualquier modista de tu zona, o bien seleccionar modelos entre las pocas opciones que tenemos las que usamos tallas grandes.